Entre París y Londres hay 367 kilómetros, recorridos hasta hace poco mayoritariamente en avión. Cuando se inauguró el tren que conectaba ambas ciudades a través del túnel de la mancha se logró un acercamiento de las dos grandes ciudades europeas.
Para 2012, año en que se celebrarán los Juegos Olímpicos en la capital británica, se prevé la inauguración del gran acontecimiento que potenciará y fomentará el transporte sano y limpio en el viejo continente: la Avenida Verde unirá París y Londres mediante su red de carriles para bicicleta.
La historia del transporte entre París y Londres nos muestra hacia dónde se dirige la movilidad del futuro: los poderes públicos deben apostar por unos medios de transporte cada vez más blandos y menos contaminantes.
La nueva Avenida Verde partirá, por el lado británico, desde Londres para atravesar el este de la región de Sussex y la región de Kent antes de llegar a Newhaven, donde el ciclista tomará un pequeño ferry para cruzar el Canal de la Mancha. Una vez en Francia, la Avenida Verde continuará por Dieppe y recorrerá una parte de Normandía y la zona norte de París hasta llegar a la capital francesa.
El objetivo es que los amantes de la naturaleza puedan descubrir paisajes hasta ahora inaccesibles. Se tratará de enlazar diferentes puntos de la ruta con el transporte público para facilitar el acceso a la Avenida Verde a quienes lo deseen.
La Avenida Verde inaugurará un trayecto provisional en 2012. La finalización de la obra se prevé para el año 2014. La Avenida Verde estará financiada en un 25% por Francia, un 25% por Inglaterra y un 50% por la Comunidad Europea.
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